Las hermanas del Santo Ángel están de enhorabuena, pues celebrar los 175 años de una Congregación es adentrase en el espíritu los Fundadores, es reafirmar el carisma recibido y es hacer memoria agradecida de tantas hermanas que, a lo largo de estos años, han seguido las huellas de quienes nos precedieron y con su vida han dejaron frutos de santidad.
Este tiempo es gozo por el camino recorrido y por tantas personas que han sido compañeras y compañeros de camino y juntos, hemos sembrado semillas de evangelio, en la escuela, en la misión, en los barrios, en parroquias y en tantos lugares donde ha llegado nuestra presencia.
Según ellas : Ser ángeles visibles es nuestro compromiso y nuestro modo de nuestro ser y estar, como el Ángel que guía, acompaña, cuida, bendice y alaba. Por esta historia vivida agradecemos y alabamos a Dios, de quien nos viene la fuerza y de quien recibimos toda gracia. " El nombre de Hermanas del Ángel de la Guarda, es para nosotras símbolo y programa y ha de reflejarse en las tareas apostólicas"
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