Falleció el Rvdo. Sr. D. Don Gilberto Lorenzo Reigada
Nació en Osoño - Villardevós (Orense) el 1 de junio de 1936
Muy niño conoció a los frailes mercedarios en la localidad orensana de Verín, ingresando muy joven en la Orden de La Merced. En esta familia religiosa es ordenado sacerdote el 22 de julio de 1962 en Santiago de Compostela.
Destinado por sus superiores a tierras malagueñas, decide abandonar la vida religiosa pasándose al clero secular. En Málaga ejerció como profesor de Religión y de Griego en el Instituto Nuestra Señora de la Victoria de Málaga. Se incardina en esta Diócesis el 12 de abril de 1973 en la cual ha pertenecido siempre. En la misma recibió las siguientes encomiendas:
Encargado de Santiago el Mayor de Montejaque (1967)
Coadjutor de Nuestra Señora de la Encarnación de Alhaurín el Grande (1967 - 1971)
Ecónomo de San Sebastián de Casares (1971 - 1976)
Encargado de Baños de Hedionda, Monte Duque, Majada y La Acedia (1971 - 1976)
En el verano de 1976 su hermana, que vivía en Gijón, cae enferma en cama y Don Gilberto pide permiso al entonces obispo de Málaga, Monseñor Ramón Buxarrais Ventura, permiso para ausentarse de la Diócesis. Viene así desde Andalucía a Asturias para atenderla y con la cual vivió en su modesto domicilio de la calle Gamboa en el barrio de Nuevo Gijón. Al cabo de un año sin cargo pastoral (1976-1977) viendo incierto el tiempo que habría de estar con su hermana, se pone a disposición del Arzobispo de Oviedo para poder seguir ejerciendo el ministerio al tiempo que cumple sus obligaciones familiares. Su hermana falleció en el año 2012. Todo su ministerio sacerdotal en Asturias estuvo siempre vinculado a la ciudad de Gijón.
Sus encomiendas pastorales en esta diócesis fueron:
Vicario Parroquial de San Lorenzo (1977 - 2021)
Encargado de Santa Bárbara del Poblado (1998 - 2021)
Sacerdote siempre disponible para todos, en el confesionario y a pie de calle. Desempeñó un apostolado especial con los enfermos, llevando la comunión a numerosos feligreses que ya no podían salir de casa. Su presencia en el Hospital de la Cruz Roja de Gijón, uno de los centros sanitarios donde más gijoneses fallecen y que no cuenta con capellán propio, era constante su asistencia para administrar la Unción o llevar a los moribundos el viático. Mientras las fuerzas se lo permitieron siguió recorriendo Gijón con el portaviáticos en su chaqueta. En febrero de 2021 llegó el momento de la jubilación, pues las piernas ya le fallaban para continuar el ritmo de trabajo que llevaba. Desde esa fecha hasta la actualidad ha vivido en casa de su sobrino en Careñes (Villaviciosa) donde falleció en el día de ayer. Tenía 86 años de edad, y 60 de ministerio sacerdotal.
D. E. P.
El Funeral de cuerpo presente en la iglesia parroquial de San Lorenzo, a las DOCE de la mañana del JUEVES, día 14, y a continuación, su traslado al cementerio de San Pedro de Osoño, Ourense, donde recibirá cristiana sepultura.
''Los que Dios protege viven, y entre ellos vivirá mi espíritu; me has curado, me has hecho revivir'' (Is 38) |
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