Lugones / Santolaya (Siero), F. TORRE (lne)
En tierras de Judá, hace algo más de dos mil años, una joven embarazada acudió a un pueblo de las montañas para visitar a su prima, también encinta. Según el Evangelio de Lucas, aquellas dos jóvenes eran la Virgen María y Santa Isabel, madres, respectivamente, de Jesús y Juan el Bautista. Ayer, en tierras de Lugones, los fieles recrearon aquella "Visitación" con una procesión que fue el punto culminante de los actos religiosos de las fiestas de Santa Isabel. Una procesión a la que, para completar la tradición, acudieron dos jóvenes embarazadas, para pedir a la Virgen y a la Santa que sus retoños vengan bien y que sus partos no tengan complicaciones.
Estas dos jóvenes son la lugonense Yara Suárez y la gijonesa María Iglesias, que participaron juntas en la procesión y compartieron los buenos deseos por sus respectivos embarazos, pese a que ellas no se conocían previamente.
La procesión fue, además, el punto culminante de una jornada que, no obstante, tenía otros alicientes para lugonenses y visitantes.
Estas dos jóvenes son la lugonense Yara Suárez y la gijonesa María Iglesias, que participaron juntas en la procesión y compartieron los buenos deseos por sus respectivos embarazos, pese a que ellas no se conocían previamente.
La procesión fue, además, el punto culminante de una jornada que, no obstante, tenía otros alicientes para lugonenses y visitantes.
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