Con las celebraciones de los primeros días del mes de Noviembre, los sacerdotes referimos muchas veces que en nuestros cementerios puede haber difuntos que quizá sin nosotros saberlo han sido santos a los ojos de Dios. Pues bien, hoy sí podemos hablar de uno que pisó nuestro suelo, que compartió la fe con nosotros y que aunque no esté en nuestro cementerio podemos decir, sin lugar a dudas, que ya está en el cielo.
El próximo 9 de Marzo se celebrará en la Catedral de Oviedo de forma solemne la Beatificación en la cual la Iglesia reconoce como testigos de la fe a los nueve asturianos “Seminaristas Mártires”, cuya causa llevaba años incoada y que con tanta ilusión sus familias, el propio Seminario de Oviedo, el presbiterio diocesano y la Iglesia de Asturias esperábamos desde hace tiempo.
Nuestros mártires, con su silencio y el paso del tiempo para las rigurosísimas investigaciones, desmontan cualquier propaganda o intento de manipulación política, pues su único “delito” para su martirio fue ser amigos del Crucificado, lo cual les llevó también a ellos al suplicio en viles asesinatos por su condición de seminaristas.
Todos estamos invitaros a participar con alegría en esta celebración; una esta efeméride inolvidable para la Iglesia Asturiana y también para nuestra propia Parroquia. Luis Prado, uno de ellos, tenía toda su familia paterna en Lugones. Deseamos que sea un momento importante para enriquecernos con su ejemplo, viviendo como Iglesia Diocesana y también como Parroquia lo que el Papa Francisco nos ha dicho tantas veces sobre “la santidad de la puerta de al lado”
Joaquín, Párroco
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