viernes, 12 de septiembre de 2014

Hacer justicia no es represaliar Respuesta del párroco de Limanes a las acusaciones de los vecinos


Respondo al artículo aparecido en LA NUEVA ESPAÑA con el título "La supresión de la catequesis enfrenta a los vecinos de Limanes con su párroco", que lleva por sumario "Los padres de los niños se niegan a trasladarlos a Colloto y denuncian que el sacerdote toma represalias por una disputa sobre el cementerio".

Hace ahora unos tres años se planteó en Limanes el caso inverso. creo que fue el curso 2011-2012: como los niños de Limanes van al colegio a Colloto, empezaron espontáneamente a participar también en la catequesis de Colloto. Yo ni lo sabía.

Entonces los catequistas que había en Limanes, y que habían sido confirmados como catequistas por mí al hacerme cargo de la parroquia en 2006, me pidieron que apoyase la vuelta de los niños a Limanes, porque creían que era un bien para la parroquia... Yo así lo hice, porque también creía que era un bien para la parroquia de Limanes. Pero aquella decisión del párroco legítimo también fue mal recibida por algunos "vecinos" de Limanes y "padres" de los niños. Algunos hasta me amenazaron y me faltaron al respeto, y otros se llevaron a sus hijos a otra parroquia y allí hicieron su primera comunión, pero la mayoría continuaron con normalidad en la catequesis de Limanes. Como ven, la historia se repite...

¿Por qué ahora el traslado inverso de la catequesis, de Limanes a Colloto?

LA NUEVA ESPAÑA dice que el párroco "elude explicar las razones que le han llevado a tomar esta decisión". Por otra parte, los protagonistas dicen que "se han enterado hace unos pocos días..."

Pero la razón es pública en la parroquia de Limanes. Se expresa en un escrito del párroco, que estuvo expuesto en el tablón de anuncios parroquial, en el interior de la iglesia, entre el 7 de junio y el 23 de agosto de este año. Pero para entender estas cosas quizás estaría bien distinguir entre "feligreses" y "vecinos" de la parroquia de Limanes. Los feligreses, que son los que realmente cuentan, estaban perfectamente informados desde el 7 de junio de 2014.

El escrito del párroco decía textualmente: "Los que hasta este curso, que acaba de finalizar, 2013/2014, fueron catequistas de Limanes se definían a sí mismos como colaboradores necesarios del párroco y bajo su dirección. Estoy plenamente de acuerdo con esta definición.

Pero este último curso 2013/2014, según mi criterio, no cumplieron lealmente esta colaboración con el párroco y culminaron dicho curso con un grave enfrentamiento y una total falta de respeto hacia el párroco, aprovechando la preparación y la celebración de la ceremonia de las primeras comuniones.

Por lo tanto, me veo en la obligación de cesarles como catequistas de Limanes -a partir de ahora no hay catequistas en Limanes- y trasladar la catequesis a la cabecera de la UPAP de Colloto a partir del próximo curso 2014/2015.

Para que conste lo firmo y sello en Limanes el día 7 de junio de 2014".

Termino, por el presente, con unas preguntas que no son nada "inocentes", solamente dos:

¿Quién convocó la asamblea en las Escuelas de Limanes para motivar convenientemente a estos padres...?

Los que convocaron la asamblea en la escuela ¿son acaso los mismos que hicieron el escrito que está a la base de este reportaje?

Algo se va sabiendo, porque no todos los que acudieron son partidarios de la postura que se refleja en el mismo.

"Los cursos de catequesis de Limanes, que dispone desde hace años de tres catequistas estables...". Este párrafo también apunta hacia los autores, que tratan de acercar el ascua a su sardina.

A los mismos autores, los que convocaron la asamblea y los que hicieron el escrito, quisiera decirles que las mentiras tienen las patas muy cortas:

1. Habláis de 200 firmas en Limanes reclamando al Arzobispado un cambio de párroco... Pero la realidad es que fueron 800 firmas: de Limanes, de Pando, de Colloto, de Tiñana, de Lugones, de Oviedo, de Tudela Veguín...

2. Estas 800 firmas fueron enviadas al Juzgado n.º 4 de Oviedo (y posteriormente a la Audiencia Provincial de Oviedo), acompañando la denuncia de que el párroco de Limanes había sacado los restos de una persona de una sepultura en el cementerio parroquial, y los había tirado a un contenedor de escombros... A quienes avalan con su firma una calumnia como esta, yo nunca los calificaría de buenas personas y mucho menos de buenos cristianos. Quienes han incurrido en una fechoría como esta no están en condiciones de pedir papeles, mucho menos sacramentos, sino pedir perdón por el daño causado y retractarse expresamente.

Cuando los que dirigen este nuevo atropello contra el párroco de Limanes dicen: "se hizo con una copia de las firmas y comenzó a identificarlas para después ajustar las cuentas a los firmantes", tendrían que decir: comenzamos a identificarlas, puesto que el cura no conoce por su nombre a casi nadie. Además, las firmas me las facilitó el mismo juzgado en el que estas personas me habían calumniado. El 27 de febrero de 2013 el Juzgado n.º 4 de Oviedo "acuerda el sobreseimiento de la denuncia ante la inexistencia de delito". El 9 de marzo de 2013 los denunciantes presentan un recurso contra la sentencia del Juzgado n.º 4. El 3 de julio de 2013 la Audiencia Provincial de Oviedo "desestima el recurso de apelación presentado y confirma la sentencia del Juzgado n.º 4 de sobreseimiento y archivo. Finalmente, el 13 de diciembre de 2013, en presencia del señor vicario del arzobispo, del señor cura párroco de Limanes, del señor notario de Pola de Siero, ante las abogadas de las partes y ante la Guardia Civil, se procedió a la exhumación de los restos denunciados como desaparecidos y que estaban donde siempre habían estado. Se recogieron y se depositaron en un nicho del bloque B en el mismo cementerio de Limanes.

Resumiendo y termino este escrito:

-No se debe confundir justicia con represalia.

-Y les pregunto a los organizadores, no a los que salen en la foto, sino a los que deberían de salir: ¿cuál es la razón de vuestro cambio? Antes veíais como un atropello y una injusticia contra el párroco de Limanes, como en realidad es. ¿Por qué ahora encubrís esta injusticia y hasta la defendéis? No lo entiendo.

José Manuel Pidal Cardeli , 
Párroco de Santa María de Limanes

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