Comienzo este artículo cuando la paz y el silencio de la
noche me ayudan a pensar en la siguiente “batalla” tras la vorágine litúrgica y
celebrativa de la Semana Santa.
Sin la menor duda, TODOS tenemos muchos motivos para
estar satisfechos de nuestra parroquia y de nuestro trabajo en ella. Pienso,
sincera y humildemente, que la misma ha crecido y avanzado mucho en los últimos
años. No sólo en lo material, que exige una constancia y un permanente esfuerzo,
sino principalmente en lo espiritual y pastoral, y, muy particularmente, en la
participación plural. Muchos de nuestros proyectos comunes que ya son una realidad,
eran, no hace mucho tiempo, puras utopías y buenas intenciones. Sabemos que son
muchos los que comparten nuestra alegría, no pocos los que valoran lo realizado
y que seguro habrá algunos a los que les moleste, luego está claro que estamos
en el camino adecuado.
Del buen entendimiento y reciprocidad de colaboración
entre los que formamos esta comunidad parroquial dependen en gran medida los “éxitos”
pastorales. De nada le sirve a un párroco ser muy dinámico y emprendedor si
tiene unos feligreses apáticos e indiferentes. De nada le sirve a una feligresía
un párroco muy preparado y capaz si se arredra y acomoda ante cualquier iniciativa
de sus fieles.
Esto es lo que fundamentalmente hace diferentes a unas
parroquias de otras, y, por qué no decirlo, lo que a veces genera también celos
entre unas y otras (curas y feligreses).
Nosotros, en Lugones, no estamos exentos de discrepancias internas y visiones
diferentes en todos los aspectos, pero el motivo que nos ha de enorgullecer
principalmente y que puede servir de ejemplo y reflexión para otros, es el de
poder y saber caminar juntos, feligreses y párroco. Teniendo claro que lo que
es bueno para la Parroquia es bueno para el párroco, y lo que beneficia al
párroco, beneficia sin duda a la Parroquia.
Por eso, y por medio de éste, quiero dar las gracias más
sinceras a TODOS los feligreses de Lugones por su ejemplo de participación e
implicación sincera en la vida de la Parroquia. Los que actúan en diferentes
iniciativas y tareas (Catequésis, Cáritas, Cofradía -muy particularmente en estas fechas-; Liturgia (lectores permanentes y esporádicos) Equipo
de Monaguillos/as, Consejo Pastoral, Limpieza, profesionales que nos ayudan
permanentemente y a cualquier hora (Albañil, electricista, carpintero…),
Organista, sacristanes, voluntarios para las colectas, Funeraria S. Mateo… y
también a los periodistas locales, siempre atentos a nuestras iniciativas y
transmisores de nuestras noticias, pero, sobre todo, a la feligresía
incondicional que abarrota con su presencia, participación, cantos y oraciones,
nuestras celebraciones de todo el año.
No hay nada más pleno y satisfactorio para un párroco que
saber que cuenta con una Parroquia viva y participativa, por eso a todos y de
todo corazón, perdón por los errores y “meteduras de pata” (que también las hay) y muchas; muchas gracias por estar ahí. Y a
TODOS… ¡¡FELIZ PASCUA DE RESURRECCIÓN!!
Joaquín
(Párroco)
No hay comentarios:
Publicar un comentario