+Por la señal...
-Señor mío Jesucristo
Oración para todos los días
¡Oh Madre nuestra, Inmaculada Reina del Cielo, María Santísima del Buen Suceso. Hija predilecta del Eterno Padre, Madre del Divino Hijo, Esposa carísima del Espíritu Santo, excelso Trono de la Majestad Divina, Templo augusto de la Santísima Trinidad, en quien las tres Divinas Personas han derramado los tesoros de su Poder, Sabiduría y Amor! Acordaos, Virgen María del Buen Suceso, de que Dios os ha hecho tan grande para que podáis socorrernos a nosotros pecadores. Acordaos que habéis prometido muchas veces mostraros Madre piadosa de los que recurran a Vos, nos acogemos Madre misericordiosa y os rogamos, por el amor que os tuvo el Altísimo, nos alcancéis de Dios Padre la gracia de vivir y morir según las máximas del evangelio.
Invocación
¡Oh Señor de infinita bondad!, que con la milagrosa invención de esta imagen de María Santísima del Buen Suceso nos habéis dado un recurso poderoso para acudir con toda confianza a su amable protección en nuestras necesidades, concédenos los auxilios con que encontremos fervor y confianza para saber honrar y servir a esta vuestra Criatura predilecta; para que por su intercesión alcancemos nuestra santificación y después el Cielo. Amén.
Oración
¡Oh Virgen bendita entre todas las mujeres!, nos faltan voces para daros gracias por los innumerables buenos sucesos que de vuestra mano recibimos. El día que nacisteis al mundo puede llamarse día de gracia, de salud y de consuelo. Vos sois el honor del Carbayu, la alegría del Paraíso, la prenda amada de Dios y la salud de nuestro pueblo. Virgen Santísima del Buen Suceso, Madre clementísima, sed nuestro consuelo en la tierra, siendo nuestro refugio, nuestro auxilio, y protección, así en los males del alma y del cuerpo. Haced que se aparten de nosotros todo mal y pecado. Rogad por la Santa Iglesia y sus ministros, por nuestra Parroquia y nuestro pueblo. Oíd las súplicas de los que os invocan, acordaos que sois nuestra Abogada, nuestra Madre; pues como a tal ponemos en Vos nuestra confianza. A vos recurrimos, y esperamos que nos alcanzaréis de vuestro Hijo, el perdón de nuestras culpas y perseverancia en la gracia hasta la hora de nuestra muerte. Amén.
Pídase la gracia que se desee alcanzar en este triduo por la intercesión de Nuestra Señora del Buen Suceso
Bendita sea tu pureza...
No hay comentarios:
Publicar un comentario