(Iglesia de Asturias) Este martes, 4 de septiembre, ha tenido lugar el acto de entrega de los nuevos nombramientos para este curso pastoral que ahora comienza, en la sede del Obispado. En el acto, que estuvo presidido por el Arzobispo de Oviedo, Mons. Sanz, acompañado por el Vicario General, Jorge Juan Fernández Sangrador y el Canciller Secretario, Jaime Díaz Pieiga, se hicieron efectivos los nombramientos y cambios que se habían anunciado el pasado mes de julio, cerca de 86 nuevos destinos y encomiendas para sacerdotes y laicos en la diócesis.
En el transcurso del mismo y antes de proceder a la entrega de los títulos, Mons. Jesús Sanz quiso recordar a las personas fallecidas y los heridos en el accidente de autobús, ayer, de la empresa Alsa que recorría el trayecto Cudillero-Avilés-Gijón. También tuvo un recuerdo especial para un joven sacerdote fallecido, también en accidente de tráfico, en la diócesis de San Sebastián.
Dirigiéndose a los presentes, Mons. Sanz recordó que en estos días de la Novena de la Santina, “ponemos en manos de la Virgen este curso pastoral que comienza, más allá de eventos y efemérides”. Con las nuevas responsabilidades, los sacerdotes “ponen un paisaje más en el itinerario del viaje de su vida”, recordó el Arzobispo de Oviedo, y agradeció la disponibilidad de la mayoría “a cumplir la voluntad del Señor, aceptando la propuesta que se os hace desde la Iglesia”. Unos cambios que comienzan a dibujarse en el mes de febrero, por parte del Arzobispo y de su Consejo episcopal, donde “tratamos –añadió– de conciliar y aunar cómo hacer mejor las cosas. Yo tengo conciencia de que hago lo que hago como mejor puedo y dejándome aconsejar por quienes Dios ha puesto a mi lado como consejeros”. Y subrayó la importancia de “pedir ayuda, pues con comprensión nos podemos ayudar los unos a los otros. Una actitud adulta es la que se asoma a la realidad y con mesura dice cómo están las cosas y se deja ayudar”, con el deseo siempre de que “lo que construyamos todos, sea para mayor gloria de Dios y se convierta en bendición para nuestros hermanos”.
Adolfo Mariño Gutiérrez, nuevo Vicario Episcopal para el Real Sitio de Covadonga y otros santuarios diocesanos
El Arzobispo de Oviedo, Mons. Jesús Sanz Montes, ha nombrado al Abad de Covadonga, Adolfo Mariño Gutiérrez, Vicario Episcopal para el Real Sitio de Covadonga y otros santuarios diocesanos.
El nombramiento se ha hecho efectivo esta mañana, en el transcurso del acto de entrega de los nuevos cargos pastorales en la diócesis.
La Vicaría Episcopal para Santuarios tiene como misión propia, entre otras, “dirigir y coordinar la acción pastoral a realizar en los santuarios ubicados en la Archidiócesis, fomentando con esmero la vida litúrgica, principalmente la celebración de la Eucaristía y de la Penitencia”, así como “otras formas aprobadas de piedad popular”. Además, podrá promover el intercambio de iniciativas pastorales con otros santuarios nacionales e internacionales, así como la proyección nacional e internacional de los santuarios de la diócesis, en especial el de Covadonga.
Adolfo Mariño Gutiérrez nació en Avilés, el 9 de octubre de 1953. Fue ordenado sacerdote en 1979, y nombrado Abad del Santuario de Covadonga, por Mons. Jesús Sanz Montes el 14 de junio de 2017.
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