El Museo de Covadonga acondiciona su espacio para mejorar su accesibilidad

También se mejora tanto la conservación como la forma de exhibir las piezas

(Rtpa) El Museo del Real Sitio de Cuadonga / Covadonga ha llevado a cabo una profunda transformación de sus instalaciones, ubicadas en las plantas baja y primera del antiguo Hostal Favila, y ha diseñado una nueva museografía que asegura la adecuada conservación y exhibición de las piezas y facilita la comprensión y el disfrute de las obras a todo tipo de público.

Esta iniciativa, promovida por el Arzobispado de Oviedo / Uviéu, ha sido posible gracias al mecenazgo de la Fundación María Cristina Masaveu Peterson (FMCMP) que en 2017 puso en marcha la catalogación de las Colecciones del Real Sitio de Cuadonga que serán expuestas en el nuevo museo reformado bajo la dirección científica de los doctores Yayoi Kawamura y Vidal de la Madrid.

Ambos son autores, junto con Javier Barón, Javier González, Alfonso Palacio y Juan José Tuñón, del Catálogo de las Colecciones del Museo de Cuadonga en 2018 y que sirve de base científica para el desarrollo del discurso expositivo y museológico del Museo del real Sitio de Covadonga.

Esta obra está promovida por el Arzobispado de Oviedo y cuenta con el mecenazgo integral de la Fundación, que ha aportado recursos profesionales, técnicos y económicos y se suma a otras iniciativas anteriores llevadas a cabo por ambas instituciones.

El espacio, construido entre 1920 y 1931 por los arquitectos Miguel Ángel García-Lomas y Urbano Manchobas para proporcionar alojamiento digno a los peregrinos, incluye además obras en depósito como la Serie Cronológica de los Reyes de España, propiedad del Museo del Prado.

La renovación posibilita la reinterpretación de los fondos artísticos del museo, formados por 133 piezas entre pinturas, esculturas, dibujos y artes decorativas e incluye las coronas para las imágenes de Nuestra Señora de Covadonga y Jesús Niño, de Félix Granda Buylla, o la estampa Puntual diseño del santuario de María Santísima de Covadonga, de Jerónimo Antonio Gil y Antonio Miranda.

Entre las donaciones figuran la casulla elaborada a partir del terno donado por la reina doña Bárbara de Braganza a mediados del siglo XVIII y las piezas obsequiadas al santuario por el Príncipe de Asturias en 1858.

También se exponen obras escultóricas barrocas de singular interés, como el Crucificado de marfil de la primera mitad del siglo XVIII perteneciente a la escuela hispano-filipina o el San Miguel Arcángel del tercer cuarto del siglo XVIII, dotado de un asombroso dinamismo.

También se ha incorporado a la colección de una pieza de nueva producción donada por la Fundación María Cristina Masaveu Peterson al Cabildo del Real Sitio de Cuadonga, un díptico con la reproducción a escala real del anverso y reverso de la Cruz de la Victoria custodiada en la Cámara Santa de la Catedral de Oviedo junto a otras reliquias.

Además, el Museo de Covadonga reservará desde ahora un lugar para la instalación temporal de una “obra invitada” y la primera será será La Batalla de Covadonga, de Augusto Ferrer-Dalmau, cedida por el Ayuntamiento de Cangues d’Onís / Cangas de Onís y que estará expuesta en el museo hasta el 1 de junio 2024 cuando retornará a su ubicación en la Casa Riera de Cangues d’Onís.