Páginas

viernes, 26 de mayo de 2023

Seis nuevos sacerdotes para la Iglesia asturiana: “Tenemos ilusión, inmensa felicidad y un poco de miedo”

(COPE) “El dueño de la viña llama a unos a primera hora de la mañana y, a otros, a última de la tarde”. Con esta frase, el Arzobispo de Oviedo, monseñor Jesús Sanz Montes, comunicó a José María Sauras Vázquez que podía ser ordenado sacerdote pese a tener 72 años cumplidos, tres hijos y dos nietas. Este policía nacional jubilado supo que quería ser presbítero al fallecer su esposa, Mari Carmen, que fue “quién me iluminó”.

“Estoy feliz, mis hijos también están contentos y orgullosos de su padre, qué caramba”, explica Sauras que es uno de los seis diáconos que serán ordenados sacerdotes este domingo en la Catedral de Oviedo.

José María es el de mayor edad. El más joven es el ovetense Jesús del Riego Ruiz que tiene 25 años. “Sería un temerario si no tuviera cierto temor a equivocarme, pero confío en Dios”, afirma.

La llamada de Dios también le llegó muy pronto al colombiano Jhon Steven Rivas. Con tan solo 10 años supo que “había una semilla en mi interior”. Ahora tiene 26 años y dará su primera misa el 6 de junio en la parroquia de San José de Gijón.

Desde Colombia llegó también al Seminario Metropolitano de Oviedo el informático Andrés Camilo Cardozo que tiene 31 años. “Dios, a veces, se vuelve intenso y lo tenía en mi corazón así que me dejé mimar por la Iglesia”.

El madrileño José Javier Alumbreros, de 33 años, descubrió siendo un chaval que “quería ser como el sacerdote de mi parroquia en Alcalá de Henares”. Aunque al principio tuvo dudas, dio un paso adelante para seguir “el plan que Dios tenía para mí y que hace feliz”.

Junto a ellos también será ordenado sacerdote el ovetense Alfonso López, de 47 años, con estudios en Derecho y que celebrará su primera misa el 6 de junio en la Basílica de San Juan el Real.

Los seis iniciaron su formación teológica en 2016 en el Seminario que dirige Sergio Martínez Mendaro. Tras siete años de preparación, aguardan con “ilusión, inmensa felicidad y un poco de miedo” la nueva tarea que la Iglesia les ha encomendado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario