Letanía asturiana. Por Rodrigo Huerta Migoya

Señor, ten piedad
Cristo, ten piedad
Señor, ten piedad.
Cristo, óyenos.
Cristo, escúchanos.

Dios, Padre celestial,
ten piedad de nosotros.

Dios, Hijo, Redentor del mundo,
Dios, Espíritu Santo,
Santísima Trinidad, un solo Dios,

Santa María de Covadonga
ruega por nosotros.

Santa Madre de Dios de Begoña
Santa Virgen de la Braña
Madre de Pastur, consuelo de Illano
Madre de la Cueva, corazón de Piloña
Madre de Guía, faro de Ribadesella
Madre del Otero, Joya de Laviana
Madre de la Balesquida, Esperanza de Oviedo
Madre del Avellano, Amparo de Allande
Madre de Villaoril, estrella de Navia
Madre de Miravalles, abrazo de Aller
Madre del Carbayu, orgullo de Langreo
Madre del Viso, perfume de Salas
Madre del Valle, caricia de Pravia
Madre del Acebo, señora del Occidente
Madre de Loreto, lucero de Colunga
Madre del Fresno, refugio de Grao
Virgen de Contrueces
Virgen del Alba de Quirós
Virgen de la Blanca de Luarca
Virgen del Remedio de Nava
Virgen de la Cabeza de Meres
Virgen de la Salud de Lieres
Virgen del Monte de Ruenes
Virgen del Castru de Onós,
Virgen de la Consolación de Corvera
Virgen de la China de Cudillero
Virgen de la Providencia de Gijón
Virgen de la Flor de Lena
Virgen de la Blanca de Nueva de Llanes
Virgen del Monsacro
Virgen de la Regalina
Virgen de la Paz de Vidiago
Virgen de la Atalaya de Puerto de Vega
Virgen de la Armatilla de Olloniego
Virgen de las Fuentes de Cayarga
Virgen del Rosario de Riosa,
Virgen de las Nieves de Blimea,
Virgen de Lugo de Llanera
Virgen de las Virtudes de Ponticiella
Virgen de la Divina Pastora de Aristebano
Reina de Bedramón
Reina de la Guía de Llanes
Reina de Lugás
Reina de los Remedios de Guimarán
Reina del Cébrano
Reina del Carmen de Arboleya, 
Reina de la Luz, Señora de Avilés
Reina de Bendueños, 
Reina del Portal de Villaviciosa
Reina del Mar de Castrillón 
Reina del Santísimo Rosario,
Reina del Campo de Castropol
Reina de la Asunción de Andrín

Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo,
perdónanos, Señor.

Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo,
escúchanos, Señor.

Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo,
ten misericordia de nosotros.

Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios.
Para que seamos dignos de las promesas de Cristo.

ORACIÓN.
Te rogamos nos concedas, Señor Dios nuestro, gozar de continua salud de alma y cuerpo, y por la gloriosa intercesión de la bienaventurada siempre Virgen María, vernos libres de las tristezas de la vida presente y disfrutar de las alegrías eternas. Por Cristo nuestro Señor. Amén.