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jueves, 29 de abril de 2021

¿Qué es la «meditación cristiana» y en qué se diferencia de las de otras religiones o culturas?

(Rel.) El Papa Francisco ha proseguido con sus catequesis sobre la oración, hablando para ello de la meditación cristiana, que no es posible –aseguró- “sin el Espíritu Santo” pues es “Él quien nos guía al encuentro con Jesús”.

“Jesús nos había dicho: ‘les mandaré el Espíritu Santo, Él les enseñará, les explicará, les enseñará y les explicará’. Y también en la meditación es la guía para ir hacia adelante en el encuentro con Jesucristo”, recalcó el Santo Padre.

De este modo, Francisco explicó que “para un cristiano meditar es buscar una síntesis: significa ponerse delante de la gran página de la Revelación para intentar hacerla nuestra, asumiéndola completamente”.

El Pontífice afirmó en su catequesis que la práctica de la meditación “ha recibido en estos años una gran atención” de la cual “no hablan solamente los cristianos” sino que “existe una práctica meditativa en casi todas las religiones del mundo”, incluso “entre personas que no tienen una visión religiosa de la vida”. Por tanto, “meditar es una necesidad de todos”.

Pero el Papa advirtió también que la meditación en el contexto cristiano “va más allá, es una dimensión que no debe ser borrada”, ya que “a gran puerta a través de la cual pasa la oración de un bautizado – lo recordamos una vez más – es Jesucristo. Para el cristiano, la meditación entra de la puerta de Jesucristo. También la práctica de la meditación sigue este sendero”.

“El cristiano, cuando reza, no aspira a la plena transparencia de sí, no se pone en búsqueda del núcleo más profundo de su yo; esto es lícito, pero el cristiano busca otra cosa, la oración del cristiano es sobre todo encuentro con el Otro con la O mayúscula, el encuentro con el Trascendente, con Dios”, agregó.

Del mismo modo, Francisco dijo que “si una experiencia de oración nos dona la paz interior, o el dominio de nosotros mismos, o la lucidez sobre el camino que emprender, estos resultados son, por así decir, efectos colaterales de la gracia de la oración cristiana que es el encuentro con Jesús. Es decir, meditar es ir, guiados por una frase de la Escritura, o de una palabra, al encuentro de Jesús dentro de nosotros”.

Citando el Catecismo, el Papa añadió que “los métodos de meditación son tan diversos como diversos son los maestros espirituales. [...] Pero un método no es más que un guía; lo importante es avanzar, con el Espíritu Santo, por el único camino de la oración: Cristo Jesús”.

“Hay muchos métodos de meditación cristiana: algunos muy sobrios, otros más articulados; algunos acentúan la dimensión intelectual de la persona, otros más bien la afectiva y emotiva. Son métodos. Todos son importantes y dignos de ser practicados, en cuanto que pueden ayudar, ¿ayudar a qué? A la experiencia de la fe”, explicó Francisco.

Pero insistió también en “los métodos de meditación son caminos para llegar al encuentro con Jesús. Pero si tú te detienes en el camino, y solo ves el camino, nunca encontrarás a Jesús, harás un ‘dios’ del camino, y es Dios que te está esperando allí, es Jesús que te espera, y el camino es para llevarte a Jesús”.

Por último, el Santo Padre concluyó que “no hay página del Evangelio en la que no haya lugar para nosotros. Meditar, para nosotros cristianos, es una forma de encontrar a Jesús. Y así, solo así, reencontrarnos con nosotros mismos. Y esto no es un replegarse en nosotros mismos, no, es ir hacia Jesús y en Jesús reencontrarnos a nosotros mismos, sanados, resucitados, fuertes, por la gracia de Jesús. Es encontrar a Jesús salvador, de todos, también de mí, y esto gracias a la guía del Espíritu Santo”.

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