La devoción que florece en Lugones

Doce mujeres del grupo parroquial de San Félix ultiman la alfombra floral de 23 metros para el Corpus

(El Comercio) El 3 de junio tiene lugar la procesión del Corpus en Lugones. Desde hace seis años, la celebración va unida a una tradición que rápidamente se ha ganado un lugar en el imaginario de los vecinos. Por séptimo año consecutivo, y desde hace algo más de un mes, Rosi Menéndez, Marisa Suárez, Tina Martínez, Conchita Flórez, Pili Meana, Mari Cruz Pérez, Paula Vallina, Carmina Menéndez, Carmen García, Yolanda Quirós, Rosa Rodríguez y Nides Berdasco se afanan en tener lista la alfombra floral que lucirá en los festejos. «Somos el mismo grupo que nos encargamos de preparar la alfombra desde 2012», dice Berdasco.

Estas doce mujeres empiezan con los preparativos «mes y medio o dos meses antes» del Corpus. «Primero empezamos con los diseños y a buscar materiales», comenta. La alfombra de este año mide «unos veintitrés metros», longitud que «depende de los dibujos». En este caso el diseño va a ser «un poco más sencillo que otras veces, también porque empezamos algo más tarde».

«Este año vamos a hacer cruces, sobre todo; también creamos un motivo con dibujos de unas aspas. Buscamos un dibujo mas sencillo y, sobre todo, el colorido», recalca. Comenta que le dedican a la elaboración del manto floral «unas cuatro horas todos los días». «Le echamos tiempo, porque parece mentira la cantidad de detalles que hay. Cosas que parecen una nimiedad, como picar el verde, te llevan muchísimo trabajo, aparte de que es cansado y monótono. Verde, pétalos de flores, borra de café, diferentes arenas, goma y caucho son algunos de los materiales empleados en la fugaz obra de arte. «Nosotras ya sabemos que es un trabajo efímero, para dos horas. Se monta a las diez de la mañana y a las tres ya está destrozada, pero se hace también un poco de cara a los críos. a nosotras eso también nos da satisfacción», concluye.